lunes, 7 de julio de 2008

¿cocina venezolana o regionalista?

Comida venezolana ¿Cómo la podemos definir? Una hallaca, un pabellón o una arepa. Nuestra gastronomía es mas que eso; nuestro país posee una innumerable cantidad de productos, que son únicos de cada región, y que solo se dan en ese lugar en todo el mundo, como es el ejemplo del ají dulce, así mismo sus platos típicos.

Ojala cada venezolano tuviera la oportunidad de viajar y conocer cada estado de nuestro país, para que en realidad se diera cuenta de que no es solo una arepa, ni un asado negro, lo que identifica a la gastronomía venezolana, si no que también tenemos ese pastel de chucho, que podemos encontrar en Nueva Esparta, también esas arepitas andinas tan rica del mercado de Mérida, o eso patacones tan buenos cerca del lago de Maracaibo, y que me dicen de esa carne en vara de los llanos, eso en realidad es lo que identifica a Venezuela como potencia gastronomita, lastima que ni el mismo venezolano lo ha descubierto por preferir un restaurante español, uno italiano, un japonés, solo por dar un ejemplo, y sin contar el poco tiempo que tenemos para dedicarle a la cocina en nuestros hogares por cuestiones de tiempo y trabajo, prefiriendo así llevar a los niños y a la familia a lugares de comida rápida, donde desde niños preferimos una hamburguesa, un perro caliente, o una pizza; antes de un asado o un pabellón.

Pero si lográramos, no solo unir las cocinas regionales; si no también llevárselas a los hogares venezolanos. Podríamos lograr que nuestra gastronomía llegue a otros países.

Aunque también hay que agradecer a los chef venezolanos de la talla de Sumito Estévez, Víctor Moreno (padre e hijo), que gracias a ellos y a otro numero incansable de venezolanos. Que están poniendo a nuestro país en el mapa gastronomico. Gracias a todos ellos.

Pero no solo deben ser ellos los que saquen a relucir toda nuestra gastronomía si no también nosotros que somos la nueva generación de cocineros, y es nuestro deber el poner primero a nuestro país antes que cualquier otra cocina para así lograr que Venezuela llegue a un nivel de potencia gastronómica.

Y la única manera de que conozcan nuestra gastronomía es que por lo menos podamos encontrar un restaurante de comida venezolana en cada país del mundo. E incluso mas de un restaurante en cada lugar de nuestro país.

LA INTERNACIONALIZACION DE LA COMIDA VENEZOLANA


Es interesante hablar de la internacionalización de la comida venezolana, si definiéramos la palabra internacionalización, nos encontramos con que se trata de dar a conocer y hacer parte a varia naciones de un asunto que para las mismas es ajeno.

La cocina Venezolana está influenciada por diferentes aspectos. Principalmente por sus raíces y costumbres producto de la unión de razas, del encuentro entre europeos, africanos, e indígenas. Tenemos una gran variedad de platos y costumbres culinarias que han pasado de generación en generación, adquiriendo formas que son la base de nuestra comida típica y que han generado en la familia venezolana un sentido de identidad, sentido de identidad que ha mermado a través de los años producto de la globalización y el desarraigo del venezolano con sus raíces.

Actualmente tenemos influencias de muchísimos países y culturas diferentes, producto de la inmigración de habitantes de un país a otro y el avance de las comunicaciones, nuestras costumbres no son lo único que conforma la cotidianidad gastronómica del venezolano, sino que acogimos nuevas tendencias, nuevas técnicas nuevos ingredientes que caracterizan hoy nuestra vida gastronómica. Estas nuevas tendencias han hecho olvidar un poco al venezolano, cuáles son sus raíces y de donde venimos, por lo que actualmente no existe un sentido de identidad suficientemente fuerte como para que podamos ofrecernos al mundo como una opción gastronómica.

Para internacionalizar la comida venezolana nos falta un largo camino por recorrer. Lo primero que hay que hacer es generar en nosotros mismos y en la población un sentido de identidad del cual nos podamos enorgullecer y que sea bandera de un país que respeta y enaltece lo suyo, educar a la población, en líneas generales, desde el niño hasta el adulto, apoyándonos en las instrucciones y en los medios de comunicación, para generar conciencia, apego a nuestra historia y revivir el cariño de la sociedad para con sus raíces.

Nos corresponde a todos los que escogimos el camino de la gastronomía, como profesionales y futuros profesionales, enaltecer nuestras raíces culinarias, buscar la manera día a día de generar esa conciencia, instruyéndonos, investigando a fondo lo propio de nuestra tierra, nuestros productos, lo que tenemos y aun no explotamos y utilizarlos para creaciones que puedan convertirse en nuevos platos típicos y marcar pauta a nivel mundial. Es necesario tener lugares en donde la gente de nuestro país y de otros países pueda disfrutar de la comida venezolana, distintas propuestas que se adapten a todos los niveles sociales, necesitamos que todo el mundo tenga acceso a la comida venezolana, y a todas sus tendencias.

En conclusión la comida venezolana no ha podido internacionalizarse porque aun es ajena a nosotros mismos, pero tenemos un país llenos de oportunidades y recursos, que debemos aprovechar para generar lo que más falta nos hace, identidad.

INTERNACIONALIZACION DE LA GASTRONOMIA VENEZOLANA



Una nación con tan rica sazón aun duerme dentro de sus propias fronteras, en nuestro país sobran los platos que son engendrados en el interior de nuestros hogares, en esas cocinas donde la ciencia, arte y materia prima se fusionan en esas recetas que dan como resultado manjares dignos de exportación. Esta gastronomía oculta a esos paladares del mundo, y lo que muchos nos preguntamos es ¿Por qué?.

Muchas son las hipótesis que se manejan sobre el porque nuestra comida no se encuentra en la carta de los grandes y famosos restaurantes del mundo, donde platos como el Asado Negro o Criollo, el Pastel de Chucho, la Hallaca, una sopa como la Fosforera o una Pizca Andina tendrían su espacio al lado de platos emblemáticos típicos de naciones como Francia, Alemania, Suiza, Perú, etc…

Estamos en un “Boom Gastronomico” donde ser Chef o Cocinero en la sociedad se a convertido en todo un cliché, lo relacionan con estatus, lujo y mucho mas; podemos usar esto como herramienta para llegarle a nuestros amigos o círculos sociales y hacer conciencia que nuestra comida no tiene nada que envidiar a otras, al cambiar un poco esa manera de pensar de nosotros, podremos iniciar un marketing de nuestra gastronomía a nivel mundial y colocar productos nacionales en los anaqueles y estantes de establecimientos de cocina o comida internacionales, además de darles a los comensales del mundo una prueba de que se come en Venezuela.

Ya existen personalidades que llevan el nombre de Venezuela al resto del mundo ejemplo de ello podemos mencionar al Chef Edgar Leal actualmente impulsando nuestra comida, otra personalidad es el Chef Sumito Estévez que con su espacio en el canal Gourmet a podido llegar semanal mente a otros países dando a conocer platos y técnicas venezolanas o los señores Lovera y Moreno (padre he hijo) que a través de su instituto y medios de comunicación se han convertido en embajadores de nuestra comida; para mi estas son algunas de las llaves que están abriéndonos las puertas al resto del mundo.


¡Pongamos nuestra cultura gastronomita en boca del mundo entero!


Foto extraida de:

LA INTERNACIONALIZACION DE LA GASTRONOMIA VENEZOLANA

LA INTERNACIONALIZACION DE LA GASTRONOMIA VENEZOLANA

La internacionalización de la comida venezolana es un tema bastante interesante para todas las personas que se encuentran en este país, y estoy segura que nuestra comida criolla están llenas de preguntas y de historia porque nuestra comida proviene de siglos atrás. Ismar Castillo (compañera de clases) y mi persona tuvimos la oportunidad de conversar con el señor Armando Scannone, un gran conocedor de la gastronomía venezolana. Sus palabras, y su gran conocimiento nos dio a entender que Venezuela apenas está comenzando a darse a conocer con nuestra comida y nosotros, como venezolanos y estudiantes de gastronomia tenemos que colocar todo nuestro empeño para no dejar a un lado nuestra gastronomía que es tan importante. Sé que hay compatriotas que han salido del país y abrieron su propio restaurante en la localidad que residen en la actualidad, pero en realidad si nos colocamos a sacar cuentas de la cantidad de venezolanos que se van al exterior, no todos asumen un rol tan importante como el preparar comida criolla, porque en sus mentes está el creer que este tipo de comida es solo arepa, hallaca, pabellón , que nadie quita que son tres platos maravillosos, pero estos sabores propios de nuestra nación son bastante extensos. Sólo tendrían que retomar nuestras costumbres gastronómicas. Sabemos que cuando abandonamos nuestro sitio de origen extrañamos la comida, las costumbres, las vivencias, pero son muy pocos lo que exponen nuestra gastronomía y si no se ha internacionalizado es porque muchos han dejado en el pasado su memoria gustativa y no se han dedicado a exportar todos los conocimientos y sabores en el que Venezuela resalta.
Señores, nosotros como hijos de Venezuela tenemos que apoyar nuestras raíces y las recetas que provienen de generación en generación. Estoy segura que si le pregunto a un grupo de personas cuando fue la ultima vez que comió una olleta criolla , un Juan sabroso, o un pastel de chucho estoy segura de que son muy, pero muy pocos, las personas que me responderían que han probado aunque sea uno de esos platos, y los nombrados solo son unos pocos de los tantos platos venezolanos que existen y esto es para que todos nos demos cuenta que en Venezuela si hay gastronomía si hay comida espectaculares llenas de una explosión de mezclas y sabores que están en manos de cada uno de nosotros, mas Venezuela un país que contiene una gran cantidad de ingredientes que están llenos tradiciones y, como dije anteriormente, es apenas que está comenzando, pero le falta mucho y es gracias a los medios como elgourmet , libros como los de mi cocina de Armando Scanonne, y solo por nombrar algunos de los mas importantes y que han influido en mí y el interés que tengo en este tipo de comida. Chef como José Luis Álvarez y Víctor Moreno que se han dedicado en cuerpo y alma a la gastronomía venezolana y al interés majestuoso de nuestra comida. Lo que puedo decir es que no dejemos que nuestras tradiciones caigan y mucho menos nuestra memoria gustativa como bien lo dice el profesor Merlín, demos todo lo mejor de cada uno de nosotros para que el mundo conozca de que es capaz hacer nuestra gastronomía, y más que comer es la satisfacción y el placer de nuestros ingredientes y todas las sensaciones y recuerdos que nos llegan al alma y con todo esto no puedo mas que decir que viva Venezuela y todo lo que en ella contiene incluyéndonos a todos. Orledy Vela

domingo, 6 de julio de 2008

INTERNACIONALIZACION DE LA GASTRONOMIA VENEZOLANA

Al hablar de la gastronomía Venezolana, recordamos todos aquellos platos que nuestras abuelas nos preparaban con tanto amor y dedicación entre ellos los bollos pelones (de carne o pollo), el pabellón criollo, el asado criollo o negro, un buen hervido de pollo, gallina, carne o pescado, las empanadas con su toque dulce, la arepa que solamente con mantequilla es sabrosa que puede acompañar y también puede ser rellena, las queridísimas cachapas con queso e mano y la única en el mundo nuestra hallaca.

Cuando la abuela hacía un plato no faltaba el apreciado postre, dulce casero que lleva un particular y esmerado trabajo. Recordamos aromas como el del clavito de olor al hacer el dulce de lechosa, la canela cuando se hace el majarete también la melaza al hacer los buñuelos de yuca y como olvidarnos de nuestra bebidas como la chicha andina y de arroz, además el particular y refrescante papelón con limón.

Quien no recuerda la sazón de la abuela y los aromas que desprendía en la cocina cualquier comida que ella preparase. Todos tenemos registros de olores que son incomparables con otra cocina en el mundo. Poseemos una cantidad de platos que en otro país estarían orgullosos de tenerlos. Una variedad de especias, hortalizas, tubérculos, legumbres, que cualquiera desearía.

Venezuela y nuestra gastronomía es inigualable y tiene cualidades únicas en el mundo. El ají, el cebollín, el ajo, el ajoporro, la cebolla, el tomate, el cilantro, el perejil, la papa, la yuca y hasta el plátano juegan un papel importantísimo en la mesa de cada hogar venezolano y de nosotros depende la internacionalización de nuestros platos y no la nacionalización de los platos internacionales, por supuesto, respetamos y a la vez admiramos cada plato que se prepare en Venezuela y no tenga nuestras raíces.

Cada día hay mas restaurantes de comida internacional en Venezuela de igual manera franquicias de comida rápida, tal vez por las influencias que dejaron inmigrantes hace mucho tiempo; Como resultado hemos dejado a un lado nuestra herencia gastronómica determinando que en estos últimos años ha habido desinterés por lo nuestro.

Sabemos que la internacionalización de nuestra gastronomía no va a ser inmediata, pero debemos empezar a trabajar en ello, esperemos que sea nuestra conciencia la que pueda ayudarnos al momento de tomar la mejor decisión en lo que vayamos a comer y seamos mas nacionalistas y queramos mas a nuestros país, para así en un futuro inmediato sean nuestros platos tan importantes y conocidos como una pizza, un taco o un sushi…
Por Rodney Sánchez

Internacionalización de la comida venezolana

Nosotros los venezolanos tenemos en cuenta que nuestra gastronomía posee grandes variedades, que con el tiempo hemos dejado atrás nuestras raíces debido a las influencias que tenemos de otros países (Francia, Italia, España) que se caracterizan por ser tan destacados en la gastronomía. Lo que nos diferencia de la cocina europea es la personalidad marcada como: el aroma, el sabor, el color llamativo y algunos ingredientes que obtenemos de nuestras tierras que son el cacao, el plátano, la yuca entre otros. Todos estos conocimientos lo obtuvimos gracias a los indígenas.

En Venezuela hay una gran variedad de platos pero a nivel internacional solo se destacan los siguientes platos: el pabellón criollo, la hallaca y la arepa. Esto se debe a la falta de conocimientos que algunas personas tienen de la gastronomía venezolana, también puede ser por que muchos de nuestros cocineros viajan a otros países y se adaptan a su cultura y poco a poco le ponen menos importancia a sus raíces. Debido a las consecuencias nombradas anteriormente hizo que algunos cocineros recapacitaran, teniendo como objetivo principal, aportar conocimientos más amplios de nuestras recetas y destacar nuestra cultura.

A pesar de que nuestro país sigue siendo influenciado por la comida extranjera que cambia de tiempo en tiempo debemos tener en mente que mantenemos nuestro color, olor y sabor conquistando el paladar de cada persona. Nuestro plato también se diferencia de los demás porque cada plato en nuestra cocina lleva una historia y un sentimiento escondido. Con el tiempo pasando, hemos variado las costumbres pero la historia sigue con su curso y por eso en cada una de nuestra nueva creación se consigue la raíz de nuestros antepasados. Pero al mismo tiempo estamos tratando de ser mejor para llegar a estar en el mismo nivel de los grandes países que se destacan más.

En Conclusión, la gastronomía venezolana es muy amplia y nosotros mismos lo hemos olvidado debido a la influencia de países europeos. Sin embargo, nuestros cocineros se dieron cuenta de lo que esta pasando y tratan de recuperar nuestras raíces, logrando que la internacionalización de nuestra comida sea mas aceptada por otras culturas.

Internacionalizacion de la Cocina Venenezolana (por Francisco Baptista)

Internacionalización de la Cocina Venezolana:

He decidido comenzar este ensayo, confesando el miedo e incertidumbre que sentí, cuando Merlín Gessen (mi profesor de la cátedra comunicación gastronómica) nos informó que la evaluación final sería escribir sobre “La Internacionalización de la Cocina Venezolana”, irónico no? Cómo si se tratara de lanzar un cohete a Saturno. Y es que parece mentira, que para la mayoría de los venezolanos, nuestra memoria gustativa nos remonte a sabores, aromas y platos foráneos, producto de las marcadas influencias culturales y gastronómicas de aborígenes, españoles, chinos, franceses, italianos, hindúes y americanos, que convergen desde la costa a los andes, de los llanos hasta la selva y el centro. No en vano, cada día son más las franquicias, restaurantes mediterráneos, orientales, de fusión, entre otros, que abren sus puertas para alimentar más esa invasión cultural. Recuerdo que cuando decidí aprender a cocinar lo primero que hice fue pasta con salsa boloñesa, chop suey, salmón, hamburguesas y tiempo después, nuestras arepas…, y como yo muchos. De ahí viene lo complejo de lograr en un corto plazo que nuestra gastronomía penetre como referencia importante otras latitudes, cuando aun no ha penetrado la conciencia, nivel de conocimiento y gusto de cada ser nacido en esta tierra.
Algunos expertos aseguran que seria oportuno aprovechar el creciente “boom gastronómico”, para promover dentro y fuera de Venezuela, el diverso repertorio tradicional culinario que se ha constituido por años. Imaginen por un momento que en Francia, capital culinaria por excelencia, comenzaran hablar del lomo prensado, el pastel de polvorosa de pollo o gallina, que en Italia, los reyes de la harina, conocieran el tequeño, el pan de jamón o la hallaca. Más que un “boom gastronómico” es aprovechar una era tan fascinante como esta, marcada por la globalización, sus avances tecnológicos y de conocimiento, que nos abren las puertas a nuevas latitudes donde podemos marcar pauta basados en nuestros principios y visión, como lo demuestran chefs de la talla de Edgar Leal, por citar solo un ejemplo.

Mientras que las palabras mas conocidas en el mundo sigan siendo Coca Cola, Google, Facebook, Ipod, Wii, etc, el mayor reto como futuros cocineros es enriquecer nuestros conocimientos con las propuestas llenas de mestizaje e intercambio cultural típicas de nuestra comida, conociendo a fondo a que sabe cada rincón de nuestro país mas allá de una arepa, pabellón, lisa rellena o pisca andina. Condimentar nuestras almas con la esencia pura de nuestra cultura, no solo nos hará emprendedores en la cocina, sino seres comprometidos con las generaciones futuras, que deberán despertar, así como nosotros, ese interés por la historia y tradición venezolana, impregnando con sabor y aroma, los fogones, platos y paladares de cualquier persona en el mundo.

Francisco Javier Baptista
(Venezolano, Locutor y Futuro Cocinero)

POTENCIAR LA GASTRONOMIA VENEZOLANA POR TODO EL MUNDO


Adentrarse en la gastronomía venezolana es sumergirse en un mundo de aromas y sabores que delinean el espacio de una cocina de marcados gustos y llamativos colores, de raíces indígenas y de hereditaria influencia europea, la cocina de estas tierras es la fusión de varias culturas, sin por eso dejar de ser dueña de una marcada personalidad. Se caracteriza por el uso del maíz, yuca, plátano, ají, granos, tubérculos, caña de azúcar, carnes y aves variadas, de donde derivan platos con sabores únicos y extraordinarios.
Cada región de este hermoso país se identifica por sus costumbres y expresiones propias, entre las cuales destaca la expresión culinaria, como parte de la cultura, del diario vivir, platos diversos y originales, varían según la situación geográfica de cada región, y según las forma de vida de sus habitantes.
Los platos más representativos de nuestra culinaria son por excelencia El Pabellón Criollo, La Arepa, La Hallaca, La Cachapa, Las Empanadas de Harina de Maíz, El Asado Negro, El Cazabe, El Hervido de Gallina, de Carne o de Pescado, entre los más reconocidos, se identifica en la cocina venezolana un despliegue de variados postres entre los que encontramos los de origen aborigen como El Majarete, El tequiche y Los dulces a base de papelón. Los dulces caseros de la época de la colonia en donde destaca La Torta bejarana, La Torta de Jojoto, de Pan, de Plátano, así como flanes y quesillos de piña, guayaba, naranja y coco. Otra variedad de dulces reconocidos son los Dulces en Almíbar, de infinita variedad, que van desde el Dulce de Lechosa con astillas de canela hasta el de Mamey, pasando por Guayaba, parchita, naranja, coco rallado... Otro de los postres que no podemos dejar de mencionar son los Buñuelos, esas suaves bolitas de Yuca sancochada que se fríen en aceite calentísimo, dejando una capa crujiente y dorada que esconde la mas suave mezcla de sabor, se bañan con papelón, canela, clavos y especias; Delicioso regalo heredado de nuestros ancestros. Así infinidad de platos únicos representan nuestra culinaria.
Recorrer los caminos de la culinaria venezolana, es adentrarse en un despliegue de sabores, colores y aromas inolvidables. Cada plato en nuestra cocina lleva consigo una historia, un sentimiento escondido. Se puede asegurar que nuestra historia se desenvolvió paralela al calor de los fogones venezolanos, a medida que ha pasado el tiempo han variado las costumbres y los sueños, la historia sigue su curso, pero en cada nueva creación en nuestra cocina sigue existiendo la raíz de nuestros antepasados, ese toque mágico de nuestros indios, ese abanico de especias y sabores de la colonia... La cocina venezolana es la expresión de nuestro colorido, nuestra sazón, nuestra alegría desbordante. Como nosotros, la comida es variada, mezclada, llena de color y de sabor. Déjese conquistar a través del paladar, la cocina venezolana, como la Orquídea maravillosa, el Araguaney Orgulloso y el Turpial Altanero, flor, árbol y pájaro que representan a nuestra nación, se presentará expuesta para regalarle un platos maravillosos, orgullosos o altaneros, que nunca lo dejaran indiferente ..
Siento que en nuestro gran paraíso tropical llamado Venezuela tenemos de todo para complacer cualquier paladar, pero es algo difícil de explicar que con tantas maravillas gastronómicas ocultas y misteriosas no le demos mayor importancia, es por eso que con mucho orgullo me rindo ante cualquier plato venezolano por sus olores y sus exquisitos platos típicos por ser tan inigualables maravillosos y suculentos.
Lo que me queda por decir es
¡¡ADELANTE COCINEROS PONGAMOS EL NOMBRE DE VENEZUELA EN ALTO POR TODO EL MUNDO!!

¿ES POSIBLE INTERNACIONALIZAR LA COMIDA VENEZOLANA?

Se han escrito muchos ensayos acerca de la internacionalización de la comida venezolana, y como es de conocimiento público, el problema radica en el poco interés de la población por su gastronomía, la cual está muy regionalizada por los diferentes estados, en estos se encuentra comida muy típica que no se proyecta en el país, un ejemplo notorio se da en el oriente e islas de Venezuela con su emblemático pastel de chucho, el cual no es conocido en otras regiones, o si bien se ha oído nombrar, el resto de la población no lo ha probado (incluyéndome).
Como al principio se comento acerca de una falta de interés por parte de los habitantes, se hace necesario promover la gastronomía del país, educando desde los niveles iniciales, quitando el paradigma de que la arepa y el pabellón es lo típico y único. En la mayoría de los casos pienso que la información que se trasmite a la sociedad esta sesgada a sectores de diferentes estratos sociales, los ingredientes que se venden a precios populares, que podrían satisfacer el paladar de una persona con mayor poder adquisitivo, no son tomados en cuenta, por pensar que no le corresponde a su nivel social, como lo que ocurre con la sardina, pescado nacional, el cual puede ser fácilmente elaborado de forma sofisticada y transformarse en un plato típico muy gustoso, es menospreciado en un menú de restaurant con cierta categoría, por los comensales de estratos A y B. y los que podrían degustar con agrado el plato no tienen posibilidades monetarias de ir a este tipo de lugares. También influye el ego del venezolano, que imita a otras sociedades, la sociedad de la comida rápida, la de la comida italiana, la china, la japonesa, producto de las inmigraciones, en vez de nosotros promover lo autóctono, hemos adoptado mucho de la gastronomía de estos países.
A pesar de parecer imposible la internacionalización de nuestra gastronomía, por todos los inconvenientes antes mencionados, no lo es, tenemos una oportunidad, que compete a los futuros cocineros que se están formando, en la medida que nos vayamos identificando más con nuestra cultura, nos convertiremos en la imagen reflejada en el espejo. Porque lo que se necesita es un impulso por parte del gremio culinario, ir más allá de lo establecido, atreverse a romper el esquema de que lo único que podemos internacionalizar es la arepa, que hay algo más allá de lo que todo nuestro país se puede sentir orgulloso, lo que finalmente permitirá la expansión a otras naciones.

sábado, 5 de julio de 2008

Internacionalización de la Gastronomía Venezolana


Así, como llevo mi maleta, con todas mis pertenencias, cuando emprendo un viaje, así como mis derechos como venezolana me acompañan en el mundo, es así también como llevo mi memoria gustativa fielmente arraigada a mi sentido de pertenencia. Lo que mas extraño cuando viajo, es ese aroma de hogar, a sofrito, ese aroma que como ratoncito al queso le voy detrás, el olor a tajadas friendo, al café por las mañanas y el olor a una arepita asada, todo esto me dice que soy venezolana al 100%. Todos estos aromas y recuerdos de reuniones, donde decidimos poner una punta sobre las brasas, acompañada de una rica guasacaca y yuca en todas sus versiones, esto me recuerda quien soy, y me sigue a donde voy. Siempre consigo amigos en otros países que me piden que les prepare una arepita o una empanadita con queso, cosa no muy fácil de hacer y no por la harina pan, sino por ese quesito blanco tan delicioso y que tan sabroso queda derretido dentro de las empanadas venezolanas que ese si que no se consigue . Todos los venezolanos sepamos o no cocinar, llevamos con nosotros a todos lados ese registro de sabores criollos y somos donde vayamos portadores e historiadores de nuestra cultura gastronómica, es por ello que siempre escucharemos a un venezolano decir, no hay como la comida de mi mamá, las madres siempre encierran todos los sabores y aromas que queremos en un plato, y nos hacen sentir niños de nuevo, despertándonos ese recuerdo, esa memoria gustativa.

Como venezolanos debemos realzar nuestras comidas, porque en Venezuela existe mucha variedad de especias, granos, hortalizas, tenemos un sin fin de frutas con sabores increíbles, tenemos un país rico en costas por lo tanto tenemos una variedad enorme de pescados y mariscos, pero en nuestra memoria gustativa pareciera que el pescado no tiene registro, todos tenemos la tendencia de querer aprender a cocinar platos de otros lugares, como por ejemplo, aprender a hacer un chupe o un risotto. Casi nadie le pregunta a mamá, o a la abuelita, como se hacen esas caraotas tan buenas, o ese asado negro que todos nos queremos comer en familia, solo sabemos que nos gusta, pero no reproducimos esa sazón, es por esto, entre otras cosas que nuestra comida aun no es muy conocida fuera de nuestras fronteras. Solo unos pocos profesionales se han dado la tarea de asomar la nariz gastronómica del país, dando a conocer algunos de nuestros tesoros culinarios.

Cada uno de nosotros no solo como estudiantes de cocina, sino como venezolanos, tenemos que esforzarnos más, e ir más allá de lo típico, arriesgarnos y realzar el nombre de nuestra gastronomía, que es tan extensa y exquisita, hay que demostrar que Venezuela no es solo un país de reinas de belleza y de petróleo, tenemos la valiosa labor de mostrarle al mundo nuestros fogones, nuestras técnicas, nuestros platos, porque como dijo don Armando Scannone en una entrevista que le hiciéramos una compañera y yo hace 15 días “la gastronomía de Venezuela no es conocida aun en el exterior porque en Venezuela hasta ahora es que se esta dando el fenómeno de la emigración, es ahora que ese venezolano que salio, va a llevar un poco del país con él, nuestra cocina no es cocina de ensamblaje, el sabor de la gastronomía venezolana se obtiene de un mismo proceso, dentro de la olla y en un mismo fogón, donde conseguimos el sabor venezolano tan esperado”

Nuestra labor, demostrarle al mundo que existe al norte de America del sur una porción de tierra que se llama, Venezuela.

Fotografía obtenida de: http://politica.eluniversal.com/2005/07/16/ten_art_16440A.shtml

miércoles, 2 de julio de 2008

La internacionalización de la comida venezolana


Desde las ultimas cinco décadas a habido una fusión de cocinas internacionales con la comida típica venezolana, y asi la mayoría de cocineros se han olvidado de sus raíces. Es por eso que no hemos encontrado un buen nivel de identificación ante el mundo gastronomico, por que cuando tenemos la oportunidad de representar a Venezuela se nos ocurre traer al comensal un plato francés italiano o español, debido a las constantes migraciones que recibe este hermoso país, no podemos olvidarnos de regresar el favor a esta tierra calida dándole un papel importante a la comida venezolana.

Recordemos que esto era un trabajo de obreros, inmigrantes y artesanos ahora que es un estudio considerado una
ciencia y un arte, debemos usar este estatus para inculcar nuevamente la comida venezolana a las nuevas generaciones y así tener un patrimonio histórico y cultural de nuestra comida, una deliciosa hallaca, un pabellón criollo o un laborioso pero agradecido asado negro.

Así seremos recordados por siempre porque el orgullo y el valor se premia con la eternidad y ¿por qué no? Llegar a ver un pabellón criollo o un asado negro en la mesa de un restaurante en la quinta avenida en Nueva York, en rodeo drive en los Ángeles o incluso en un hermoso restaurante en los jardines de los históricos castillos franceses de la alta cocina mundial.


Gracias
foto extraida de nestle.com.ve

LA COCINA VENEZOLANA Y SU INTERNACIONALIZACION

Venezuela es un país rico en variedades gastronómicas, tantas como regiones tiene nuestra extensa geografía. En ella se ha destacado predominantemente la gastronomía central o de Caracas, reivindicando una serie de platos y postres de gran arraigo colonial, con importante influencia europea a partir del siglo XX con la inmigración que recibió la moderna Venezuela. Pero también en Oriente (incluyendo las islas de Margarita y Coche), en Occidente, en la región Andina, en los Llanos y en la Guayana hay importantes peculiaridades culinarias muy dignas de resaltar.

Se puede decir que nuestra cocina tiene sus orígenes, en una gran parte, en los aportes del colonizador español, que supo adaptarse a las materias primas de esta generosa región del Nuevo Mundo, con modestas influencias de nuestros indígenas, que aportaron sobre todo el uso del maíz, la yuca y el ají y unos aportes aún más modestos de la cultura africana que vino con la esclavitud negra.

Por todo ello debe destacarse que, a diferencia de lo que ocurrió en México, en Perú, en Ecuador y en la misma Colombia, en nuestro país la gastronomía no tuvo un fuerte impacto aborigen y que las influencias europeas han sido muy significativas, por lo que se ofrecen grandes posibilidades para que nuestros platos más emblemáticos pudieran divulgarse y hacerse conocer por todo el mundo. Sin embargo, si nos comparamos con la cultura culinaria de otros países latinoamericanos como los antes mencionados, estamos lejos de haber logrado dar a conocer nuestras peculiaridades gastronómicas, salvo casos aislados y anecdóticos reducidos a nuestras arepas y nuestro pabellón criollo.

Por supuesto que tenemos grandes posibilidades de impactar universalmente con nuestra gastronomía. Disponemos de excelentes materias primas, como carnes de res, de cerdo, de cacería; pescados de río y de mar; el exótico chigüire. Abundante maíz, hortalizas, legumbres, la yuca y la papa, el ají (dulce y picante), el cilantro y un colorante noble como el onoto. Con estos ingredientes y un recurso humano calificado, cada vez más numeroso, conformado por muchos jóvenes chefs que están dándose a conocer a nivel internacional, la divulgación de nuestra gastronomía debería ser un hecho palpable.

En lo personal considero que esto no se ha logrado aún, por muy diversas razones. La gran mayoría de nuestros grandes cocineros han culminado su formación en el exterior y al trabajar en Venezuela consideran, con sus excepciones, que nuestra cocina es poco refinada y la ignoran, adaptándose a los patrones europeos. Pero en un mundo globalizado, donde es el momento de revitalizar las artes culinarias tradicionales y encarar una lucha frontal con la “fast food” y/o “comida chatarra”, nuestra geografía y nuestra tradición pueden aportar interesantes innovaciones culinarias, que en manos de chefs creativos, logren platos atractivos para cualquier paladar del mundo, basados en nuestro pabellón, nuestros asados, el maíz y sus derivados, la yuca y los tradicionales postres criollos…, sin olvidar la variedad de bebidas como la chicha, el guarapo de piña o de panela y nuestros rones de fama internacional.